La otra cara de la peregrinación a Itatí: caminantes estafados

“Nos estafaron en la reserva y estamos volviendo a casa”, dijo con tristeza Guillermo, quien relató lo vivido: “Se trató de una publicación en Facebook. La mujer dijo ser dueña de una santería de Corrientes. Tenía la imagen de un santo, que era su local. Dio una cuenta del Banco Nación para la reserva que debía abonarse. Era de 30.000 pesos, la mitad, y el resto se pagaba al llegar a destino, el cual era a un supuesto hospedaje en la localidad de Itatí”.

Contó cómo fue su llegada a la provincia tras un cansado día laboral, sin embargo eso no importó porque el objetivo era llegar nuevamente como hace muchos años hasta la Virgen Morena. “Soy docente, fui a trabajar (el viernes) a las 7 de la mañana hasta las 12, luego viajé 150 kilómetros hasta una escuela EFA a dar clases, volví a las 21:30 y eso de las 23 salimos para esta provincia”, detalló.

“Comencé a caminar a las 2:40, pero en el trayecto hubo un diluvio que me impidió seguir. Entonces decidí ir hasta el hospedaje (en un auto que vino de apoyo en el que estaba mi familia) y ahí me entere que ni siquiera existía la dirección dada”, contó Guillermo con mucha impotencia.

La denuncia por estafa se realizó en la comisaría local y estando en la dependencia policial se enteró de que no fue el único caso. Hubo otras diez denuncias con el mismo nombre de la santería. Lo cierto es que la santería existe, pero la propietaria es otra persona, que fue anoticiada de la situación, lo que provocó gran indignación ante el marco de celebración de fe.

Guillermo llegó junto a su familia desde un pueblo llamado Intiyaco, ubicado al norte de la provincia de Santa Fe. “Hace 20 años venimos con mi familia (esposa hija y nieto) y a pesar del mal momento vivido valió la pena caminar por las intenciones que nos permitieron estar hoy”, señaló.

“Nos vamos con bronca, pero con la fe en alto. Y más aún de haberlo dado todo como lo hacemos desde que somos jóvenes con mi esposa, cuando veníamos a acompañar a los grupos de catequesis”, aseguró.

Otra peregrina contó ser estafada, pero no quiso brindar nombres de los presuntos autores porque dijo “perdonarlos” y siguió su andar bajo la lluvia hasta el pueblo. “Venimos con fe y con fe nos volveremos”, cerró la mujer.

Fuente: Diario Epoca