Los fiscales sostuvieron que el crimen respondió a una “planificación” dentro del ámbito familiar y remarcaron que el caso exhibió “la máxima gravedad prevista por la ley penal”. Para la Fiscalía, tanto el autor material como sus padres actuaron con plena conciencia y coordinación, lo que encuadra en el artículo 80 del Código Penal y habilita la pena absoluta.
En el caso de Gustavo Obregón y Fabiana González, acusados de encubrimiento agravado, los fiscales describieron una serie de conductas destinadas a garantizar la impunidad del hecho: limpieza de la vivienda, traslado de objetos, manipulación de mensajes y participación en maniobras posteriores al asesinato. Tras repasar cada una de esas acciones, el equipo fiscal pidió una pena de 5 años y 10 meses de prisión efectiva para ambos, destacando que el único atenuante aplicable es la falta de antecedentes.
En cuanto a Gustavo Melgarejo, quien fue declarado culpable de encubrimiento simple, la Fiscalía concluyó que su participación buscó favorecer la impunidad general, y solicitó una pena de 2 años y 10 meses de prisión, más su inmediata detención.
Al cierre, el Ministerio Público pidió que el fallecimiento de Cecilia sea inscripto como femicidio en el Registro Civil y que se autorice la entrega de los restos y pertenencias recuperadas a su familia. Con los alegatos fiscales ya presentados, la audiencia continuaba con las intervenciones de las querellas antes de ingresar en la recta final para la definición de penas.
