Efectivos de la Policía Federal detuvieron este viernes a tres personas en el marco de la investigación por el caso de una red de tratas de personas con fines de explotación sexual vinculada al turismo en Paso de la Patria. De esa manera, ya son cinco los aprehendidos por disposición del a Justicia Federal.
Según se informó, entre los nuevos detenidos se encuentran un agente del Servicio Penitencia Provincial, su marido y un guía de pesca. Una de sus bases de captación, era un salón de belleza y la otra una casa de tatuajes que regenteaba una pareja joven. Allí, y en un reconocido boliche ubicado en una quinta situada por avenida Raúl Alfonsín, eran los lugares marcados por los investigadores y desde donde partió la investigación.

La operatoria utilizada
Del expediente se desprende que la captación se realizaba en varios puntos. Uno de ellos era una estética ubicada en inmediaciones de la avenida Chacabuco y Cazadores Correntinos donde una de las responsables detectaba a jóvenes con dificultades económicas y les proponía formar parte del “negocio sexual”.
La información no era completa para las chicas y solo se enteraban de la magnitud del tema cuando llegaban al destino previamente pactado por la mujer que organizaba “los envíos”. Para ello, un guía de pesca que reside en la capital correntina y el padre de la captadora oficiaban de choferes oficiales para llevar, esperar y traer nuevamente a las mujeres que formaban parte del “book”.

Según las pesquisas, otro lugar de captación resultó ser el Servicio Penitenciario Provincial, donde una oficial de esa institución, hermanastra de la joven detenida, cumplía la misma función puertas adentro del SPP y entre sus propias camaradas.
La organización contaba con al menos unas 80 chicas que estaban disponibles para “el servicio” y las iban alternando en días y horarios variables y a demanda. No se descarta que entre ellas existan menores de edad, un dato que se develará con la apertura de los teléfonos incautados. Durante los allanamientos, los efectivos de la DUOIE de la Federal pudieron rescatar a una joven correntina que aportó valiosa información a la investigación. La víctima dijo que se aprovecharon de su situación económica para atraerla a ese negocio. Aseguró que la primera vez la llevaron engañada diciéndole que iban a una fiesta privada, pero una vez en el lugar estaba lleno de turistas extranjeros.

Comenzaron a embriagarla y luego a ofrecerla. La forma de pago a la que eran obligadas las chicas usadas en la red consistía en “darles a las captadoras todo el dinero de su primer pase y luego con cada nuevo cliente aportaban un porcentaje de lo cobrado”, explicó otra fuente judicial. Esta metodología aplicaba con todas las jóvenes y una vez dentro de la red ya era difícil salir de ella. Los fines de semana iban al boliche y cuando surgía un pedido las sacaban de allí, las subían a una combi y las trasladaban hacia Paso de la Patria.