Integrantes de la Unión de Conductores de la República Argentina (UCRA), denunciaron despidos y sumarios “sin sustento” en la empresa ERSA y anticiparon medidas de fuerza si no hay avances en las próximas horas. “Estamos ante un caso de discriminación sindical. Pedimos la reinstalación automática del compañero”, afirmó Pedro Cazal, dirigente de UCRA a los medios locales.
Según el gremio, la cesantía alcanzó a Ramón Zacarías, chofer de la línea 101 y miembro de comisión directiva de UCRA, a quien —sostienen— le comunicaron el despido “sin preaviso” y mediante un escribano.
El trabajador Zacarías relató que la empresa esgrimió “atrasos y adelantos” en el servicio y que hay otros compañeros sometidos a sumarios “por coche sucio o por adelantos”, aunque, señaló, “nos autorizan a adelantar para competir con otras líneas”. El trabajador aseguró que llevaba 17 años en la 101 y que no tenía antecedentes que justificaran la cesantía.
Cazal también cuestionó una “rebaja salarial” que, según planteó, se intenta homologar a nivel local. El dirigente apuntó a ERSA por el estado del servicio: “Deberían circular unos 130 coches y hoy salen 35.
Son unidades modelo 2012 con vida útil vencida”. Y lanzó un ultimátum: “Si no hay una respuesta ya, la semana que viene habrá novedades de cortes de servicio o paros”.
