Un reciente informe plantea que las Fuerzas Armadas de Estados Unidos y sus socios en Asia deben extraer lecciones de lo sucedido en la guerra de Malvinas para enfrentar un eventual escenario en el Indo-Pacífico, que combine un ataque chino sobre Taiwán con una ofensiva norcoreana contra Corea del Sur.
Según el estudio de Geopolitical Monitor , el conflicto bélico entre Argentina y Reino Unido es un caso paradigmático de improvisación estratégica y de gestión de alianzas en un contexto de aislamiento geográfico y diplomático.

El documento sostiene que lo decisivo en Malvinas no fue un tratado formal, sino la capacidad de algunos países de brindar apoyos prácticos, desde inteligencia hasta logística y respaldo diplomático.
De este modo, el informe advierte que lo esencial en Asia será la preparación política y material de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur para sostener operaciones militares prolongadas en un contexto de máxima presión.